Las mil y una tardes [Dia 1 - Tarde]

Reeve Tuesti llega al parque donde queria empezar a dibujar su obra maestra.

Ya era media mañana el sol estaba calentando la fria tierra del parque. Contaba solo con la compañia de unos patos que estaban siendo alimentados por un viejo.

La escena era bastante tierna, por eso saque el caballete y me dispondria a dibujarlo.

Anciano escribió:- No me quedare mucho tiempo posando - Dijo el anciano mostrando su rostro desfigurado por el tiempo - Los patos son una buena compañia para gente como yo.

Al parecer me habia tocado un viejo hablador. Estaba dispuesto a sacrificar escucharle a cambio de dibujarle. El caballete ya estaba preparado pero me faltaba el carboncillo.

Anciano escribió:- Tome utilize el mio - El viejo se acerca al caballete ayudandose del bastón. Al llegar al caballete se rebusca en el bolsillo interior y me extiende un carboncillo con runas escritas - Este es mi carboncillo, creo que nos divertiremos usandolo.

El anciano se situa en el banco detras mia.


Yo queria dibujarle en el estanque con los patos - Digo amablamente - situado detras mia, jamas podre hacer mi dibujo.

Anciano escribió:- Dejame que te haga de musa contandote un cuento - El viejo alza la mirada haciendo memoria para recordar el cuento - Ya lo tengo, Todo empieza cuando Rosa Roja fue a visitar a su hermana Blancanieves...